Las contenciones mecánicas parecen armas de tortura, abuso de poder y eliminación de la diversidad por miedo a lo desconocido, porqué hemos aprendido durante muchos siglos que la diferencia hay que eliminarla, ocultarla o ignorarla, no tolerarla. Es la misma historia de siempre en la que un grupo opresor se sirve de sus privilegios históricos para oprimir a un grupo que adquiere una indefensión ante esa situación injusta. Es otra forma de manifestación del patriarcado.
Eso está muy presente en nuestras vidas desde pequeños a través del tipo de educación que recibimos, basada en el pensamiento único y el adultocentrismo (otra forma más de patriarcado), en vez de en el acompañamiento, la escucha y el diálogo constructivo.
Marc, Miembro del Observatorio de Derechos en Salud Mental de la Federació Veus (ODSaM)
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